Este domingo cuando me
dirigía al cine para ver The Amazing Spiderman, pensaba que me
arrepentiría de haber ido, ya que la razón de ir fue simplemente
que unos amigos tenían ganas de verla, y yo iba sólo por no
quedarme en casa. Pensaba que hacer un reboot de una película de
hace 10 años, que ha tenido secuelas hasta hace solamente 5 años,
era totalmente innecesario. Lo sigo pensando, pero con matices.
Lo cierto es que
Hollywood está perdiendo a pasos agigantados el interés que
suscitaba en mí hace unos años. Una década atrás, disfrutaba
enormemente con la cantidad de adaptaciones de cómics, libros o
videojuegos que se hacían para la gran pantalla. Remakes, secuelas y
precuelas. Pero en los últimos años, han llegado a resultarme tan
pesados y repetitivos que durante muchos meses dejé de ir al cine, a
no ser que fuese para ver alguna película europea, independiente, o
alguna que otra cosa que se me antojase interesante en el medio de
tanto blockbuster. Después de tragarme los bodrios de Transformers
III y Underworld IV, también por pasar el rato con algún amigo, con
este pensamiento negativo me dirigí al cine, pensando que ahí se
iban otros 7€ desperdiciados. Sólo tenía un mínimo de
curiosidad.
Tenía un poco de
curiosidad, sí, porque las anteriores películas de Spiderman no me
habían disgustado. Había disfrutado la primera, al comienzo del
boom de las películas de superhéroes, y me había gustado
especialmente la segunda parte. La tercera ya la recuerdo en medio
del hastío del exceso de efectos digitales y falta de guión de
Piratas del Caribe III y Transformers I, y me pareció bastante
pobre. Tengo que decir que nunca tuve demasiada sintonía con Tobey
Maguire y mucha menos con Kirsten Dunst, y en esta última película
suya como el hombre araña y Mary-Jane Watson, me gustaron menos que
nunca. Spiderman III, a pesar de la inclusión de la trama con Venom
y de tener más acción, me pareció la más floja de todas. Así,
había decidido que no tenía más ganas de volver a ver ninguna
película de la saga, pero me tocaron un poco la fibra de la
curiosidad al hacer este cambio de historia.
Sigo pensando después de
verla, que se han adelantado demasiado en rehacerlo. En mi opinión
no tiene sentido cuando está tan fresca todavía la otra versión.
Creo que con esta actitud de saturación, están asfixiando a la
gallina de los huevos de oro, ya que si yo me canso ahora de todas
estas versiones y remakes, otros muchos lo harán tarde o temprano.
Pero hablando por fin de
la película, tengo que decir que no me ha decepcionado. De hecho me
ha gustado. Ha vuelto a despertar en mí el interés por las
adaptaciones de cómics. Después de todas las reservas que tenía
hacia ella, es un sentimiento un poco contradictorio. Lo que he
pensado, es que deberían haber hecho esta versión directamente en
lugar de las otras.
Charlando sobre ella
después de verla, llegamos a la conclusión de que se nos parecía
mucho al ambiente del cómic, pero sobre todo a la serie animada de
los 90. Esto es bastante claro en la forma de llevar la trama, pero
también en su estética. Una imagen muy colorida, pero también con
muchos puntos oscuros, como en la serie, y planos, y secuencias muy
'de animación', y rápidos.
Las licencias que se
permiten en el argumento, como que Gwen Stacy sea una adolescente
normal que por las mañanas va al instituto, pero por las tardes
trabaje en unos prestigiosos laboratorios como mano derecha del
genio, que además es el malo. O el hecho de que Peter Parker utilice
su propia cámara de fotos, con sus datos personales escritos, para
cazar al lagarto, dejando en evidencia su identidad, son algunos de
los recursos un poco absurdos que aceptas cuando ves dibujos animados
Todo esto me recordó a las primeras versiones del Spiderman que
conocí, lo que me hizo salir del cine con la sensación de que ésta
era una versión mucho más fiel al original que la anterior saga, y
me gustó más.
En cuanto a las
interpretaciones, como ya he dicho nunca he sido fan de Tobey
Maguire, y mucho menos de Kirsten Dunst. Él siempre me ha parecido
un 'quiero y no puedo', soso hasta más no poder, y que daba a Peter
Parker una cara de pardillo constante que no daba pie a creerse su
álter ego como hombre araña. El Spiderman original nunca fue tan
'pringado'. Ella todavía peor. Parece interpretar siempre el mismo
papel, un poco diva, y ésto sólo era creíble cuando dejaba tirado
a Peter. Creo que nunca hubo demasiada química entre ambos.
Andrew Garfield me ha
gustado mucho más. Hace un papel de un tipo al que le cuesta un poco
encajar, que es un poco especial como para caer en la dinámica del
mundillo del instituto, pero no es un 'pringado'. Es un tío curioso,
con la cabeza en su sitio, y valiente. Tiene además algo que le
atormenta, proveniente de su infancia y nos los transmite
perfectamente. Este sí que es un Spiderman que me creo.
La elección de Emma
Stone como Gwen Stacy no me ha parecido tan buena idea como la de
Garfield. No es que lo haga mal, aunque en mi opinión ella también
peca un poco, poquito, de parecer que se interpreta a sí misma.
Además, creo que hay otras actrices que habrían encajado
físicamente mejor en el papel. Ella es ahora mismo una superestrella
y creo que es la razón principal de su contrato, el reclamo. No me
gusta nada cuando los estudios recurren a eso, algo que por desgracia
es bastante habitual. Me pregunto qué pasará si ella sigue haciendo
papeles en películas de éxito, y decide que no quiere seguir siendo
la novia de Parker llegado el momento a pesar del talonario. Supongo
que Sony no habrá pensado en ello.
Mención aparte me
merecen Martin Sheen y Sally Field. Me quedé de piedra cuando los ví
en pantalla. De hecho, fue una gran sorpresa, y exclamé ¡c**o,
Sally Field en Spiderman, increíble! en medio de la sala. Y un par
de minutos más tarde, lo mismo con Martin Sheen, todavía más
sorprendido. Me han parecido unos cameos-papeles bastante simpáticos,
aunque tengo que admitir que ver a esos dos grandes del cine y la
televisión interpretando a estos personajes tan conocidos, hizo
que me costase mucho más creerme sus papeles. Fue muy raro ver a
Field sin estar rodeada de Walkers, y no me refiero a los caminantes
de The Walking Dead. Para mí será ya siempre la matriarca Nora de
Brothers & Sisters, y todo el rato estaba esperando que Rachel
Griffiths o Matthew Rhys apareciesen en escena. Me pregunto también
si la actriz estará dispuesta a repetir su papel como Tía May en
las sucesivas películas que vengan.
En definitiva, puedo
decir que es una película que vale la pena ver. Le han dado la
vuelta a una saga que había perdido su gracia, y le han dado un
nuevo interés. Ha sido un movimiento muy arriesgado, habiendo pasado
tan poco tiempo, pero creo que les ha salido bien y ha valido la
pena. Si siempre os han gustado las películas de superhéroes, esta
os gustará, y si no estáis muy metidos en el género, The Amazing
Spiderman es una buena opción para comenzar.
Comentarios
Publicar un comentario